Nacido en 1931, el maestro Rafael Coronel ha sido considerado uno de los representantes más definidos del Nuevo Expresionismo Mexicano. Su interés por la naturaleza humana lo ha llevado a captarla y volverla susceptible de transformación en forma plástica. Ha expuesto en los cinco continentes, destacando la VII Bienal de Sao Paulo, en la que obtiene el Premio Córdoba al mejor pintor joven latinoamericano y la I Bienal Internacional de Pintura Figurativa en Osaka, Japón, en la que recibe el Primer Premio (1974). Es el único artista con vida que ha expuesto cuatro veces en el Museo del Palacio de Bellas Artes y además de haber recibido varios reconocimientos, su obra forma parte de importantes colecciones y museos alrededor del mundo. Su labor artística le mereció que el Gobierno de México le haya donado un espacio para el museo que lleva su nombre en la ciudad de Zacatecas.
El maestro Coronel representa en su obra la filosofía de la vida con honestidad y humanidad. Hermano menor de Pedro Coronel, Rafael Coronel sintió inclinaciones artísticas desde muy joven.Después de estudiar en la Escuela Nacional de Pintura y Escultura “La Esmeralda”, pronto desarrolló un lenguaje artístico muy singular. Su pintura acude a temas populares, sin embargo no podría decirse de ningún modo que sus tratamientos y soluciones sean producto de lo espontáneo o lo gratuito. La vocación de pintor fue algo que Rafael traía de familia. Su abuelo decoraba iglesias y dibujaba las guirnaldas que adornaban las paredes.
Cuando su padre le platicó que Pedro, su hermano, estaba estudiando pintura en México, se le hizo una de las mayores pérdidas de tiempo y una gran tontería que había pasado en su familia. En aquel tiempo los pintores jóvenes no comían de la pintura; ni los viejos, que además de pintar, tenían que dar clases en las academias.